Las fantasías eróticas pueden ser definidas como representaciones mentales de nuestra propia sexualidad. Pueden estar presentes durante toda nuestra vida y las podemos tener de manera voluntaria o involuntaria. Además, es una decisión completamente personal si es que se decide concretar una fantasía o mantenerla como tal.
Ahora, es interesante saber también que las fantasías están relacionadas con el tipo de educación sexual que hemos tenido e incluso la cultura a la que pertenecemos. Por otro lado, es importante saber que las fantasías sexuales no tienen límite, en ellas, todo vale y pueden ser fuentes de inspiración para la masturbación o también para el mismo acto sexual.
Acá te explicamos por qué ellas potencian el deseo sexual:
1-Desarrollan y mantienen la creatividad erótica: Mediante las fantasías logramos “soltar” nuestra mente en materia de sexo, lo que a la vez, nos ayudan en la excitación sexual.
2-Tenerlas son un indicador que tenemos una sexualidad saludable.
3-Podemos usarlas para salir de la rutina con nuestra pareja, de hecho, conversarlas, también potencia la comunicación con nuestra otra mitad y mejora la relación.
4-Solo pueden convertirse en un problema, cuando ellas se transforman en una obsesión.